"Dime lindura!"

Trixie es la chica más ... deseada? por los compañeritos de Timmy Turner, y un día para poder tenerla solo para él, se le ocurrió pedir a sus padrinos mágicos -Cosmo y Wanda- ser los únicos en la tierra. Al comienzo bacán, porque la tenía solo para él, pero luego se dió cuenta que era... estresante. La niña en cuestión necesitaba constantemente que le repitan lo linda que era, y la frase inolvidable del capítulo es "Dime lindura!" Pobre Timmy, al final se lamenta de semejante pedido ya que él solo no se abastecía para adular a Trixie como ella quería. Luego de haberme sentido como una Trixie, y una semana despues de haberlo llamado para oírlo decime que la relación no seguía más, me pongo a analizar un poco una de mis tres cuestiones existenciales en la relación con M.
El esperar la llamada o el mensajito del enamorado, no creo que sea solo una cosa de capricho mío. Creo que para cualquier mujer es no solo motivador, sino que además una mezcla de romanticismo, interés, por una y por la relación, claro, sin ningún extremo, nada de llamadas cada hora -peor que marcación- ni llamadas preguntando quienes estan alrededor en tono celoso. Concuerdo con muchas chicas en lo necesario que es para una saber que nos piensan, que nos recuerdan, que nos tienen presente en su mente y corazón, y la única forma de hacerlo es a través de una llamadita, cosa que se ha facilitado en estos tiempos con el celular y el correo electrónico.
Una espera una señal de vida que nunca llega y por más que él nos haya jurado y perjurado que si piensa en nosotras día y noche, nosotras necesitamos la señal.
No es solo un afán de oír cuanto nos aman, si no, de compartir experiencias, contarles cuan mal nos fue o cuan bien... y -aquí viene el punto fundamental- saber cómo les fué a ellos también.
Nosotras somos seres comunicativos, necesitamos hablar y ser escuchadas, pero nos encanta de sobremanera, oír y si nos lo piden, no diremos nada, solo escucharemos, claro que -como mujeres- siempre vamos a tener que decir que nos parece... así somos pues!
Así que no me siento ninguna engreída caprichosa por haber pedido al hombre que amaba y que decía que me amaba y que pensaba en mí todo el día, que me diera fé de ello, no, porque yo sí le enviaba mensajitos, sí lo llamaba, y claro, el no recibir respuesta dolía más.
He visto como mis amigos varones, y mis hermanos, compraban el celu de la misma empresa de telefónos que las enamoradas, quería recuperar mi Movistar para duarme con M, pero veía que él no tenía el mínimo interés de comprarse un celu Claro como yo, y pensaba si yo debía comprarselo, estuve a punto de hacerlo, pero algo me detuvo. Cada vez que yo le hacía el comentario, él respondía con algo que denotaba su nulo interés, entonces, para qué iba a comprarle un celular?
No quería suplicar por atención, los últimos meses opté por no escribirle tanto, por esperar algún mensaje de él... incluso para San Valentín esperé tontamente...
Sigo dolida, a pesar de haber dicho que entendería su NO comunicación conmigo, pero la verdad, pienso que lo que pedía era algo menos platónico y más real.
Hoy tengo mi Movistar de vuelta, el mismo número de hace 6 años, y la verdad, veo el aparatito y ni bola le presto, la mayoría de mis amigos se compró un Bellsouth -hoy Movistar- como yo lo hice, y cuando compré el Tim -hoy Claro- la gran mayoría comenzó a hacerlo también.
Es curioso tener el celular tirado, antes lo llevaba conmigo a todas partes, esperando el mensajito -porque llamadas eran muy pocas- mi vieja se sorprende que no lo lleve por todos lados como antes, pierdo llamadas, leo los mensajes tarde, pero si antes esperaba saber de él, hoy no espero ninguna señal.
El celular se me ha vuelto taaaaan pesado, ya no necesito crédito, no veo el correo esperando algo... no entro al msn seguido.
Justo ahorita escucho a mi hermano hablar por fono, lo escucho decir "hola amor" y contar todo lo que le pasó, jajaja pensar que la única que me llama porque me tiene duada para llamadas gratis todo el año es mi Coordinadora de Los Olivos.